8) Alabanza a Dios: Dice el sacerdote: ‘Dad gracias al Señor porque es bueno’, y tú contestarás: ‘Porque es eterna su misericordia’. 9) Despedida del penitente: El sacerdote te despide diciéndote: ‘El Señor ha perdonado tus pecados. Vete en paz’. (No es necesario que te acuerdes de todo eso para poder confesarte.
Haciéndose nuestro confidente, el otro -el sacerdote- nos representa sensiblemente al Otro -Dios- Y ese diálogo con él aviva nuestra fe. Algunos piensan que es difícil confiarse a una tercera persona. Sin embargo, hay en el hombre un deseo innato de confiarse a alguien. A a falta de confesarse a un sacerdote, uno se confía al primero que
rAPQ. q928e1ztge.pages.dev/67q928e1ztge.pages.dev/311q928e1ztge.pages.dev/83q928e1ztge.pages.dev/20q928e1ztge.pages.dev/81q928e1ztge.pages.dev/228q928e1ztge.pages.dev/210q928e1ztge.pages.dev/207q928e1ztge.pages.dev/70
que pasa si tomo la ostia sin confesarse